El colapso nocturno del servicio de taxis en Telde

La noche del sábado al domingo pasado, experimenté un escenario desesperante que plantea preguntas cruciales sobre la eficiencia del servicio de taxis en nuestra ciudad de Telde. A las 2:00 de la mañana, mis hijas me informaron angustiadas que no lograban conseguir un taxi, ya que ni las llamadas ni la aplicación resultaban efectivas. Este desafío nos llevó a una odisea de intentos infructuosos al contactar con Socomtaxi y la cooperativa de San Juan.

Ante la falta de opciones, decidí recurrir a mis contactos en el sector del taxi, contactando a seis conocidos de Taxis de Telde. Para mi sorpresa y preocupación, ninguno respondió. En medio de la incertidumbre, me cuestiono seriamente qué está sucediendo con el servicio de taxis en una ciudad tan poblada como Telde, donde conviven más de 100,000 habitantes junto a visitantes foráneos.

Esta experiencia no solo revela la urgente necesidad de mejorar la accesibilidad y la capacidad de respuesta del servicio de taxis en nuestra localidad, sino que también plantea interrogantes sobre la fiabilidad de los sistemas tecnológicos utilizados. ¿Por qué la aplicación y las líneas telefónicas no estaban operativas cuando más se necesitaban?

Es imperativo que las autoridades locales y los proveedores de servicios de taxi tomen medidas inmediatas para abordar estas deficiencias. La confianza de los ciudadanos en un sistema de transporte es esencial, y la falta de disponibilidad en situaciones críticas socava esa confianza.

Este incidente no solo fue una experiencia personal, sino un reflejo de una problemática más amplia que afecta a nuestra comunidad. Es hora de que se investigue y corrija este colapso en el servicio de taxis, garantizando que los residentes y visitantes de Telde puedan contar con un transporte confiable en cualquier momento del día o de la noche.

Camaro