El despilfarro en Telde: Una crítica al Alcalde y su permisividad con Juan Martel

La gestión del Ayuntamiento de Telde sigue generando controversia, especialmente en lo que respecta al uso de recursos públicos para publicidad institucional. En el epicentro de esta polémica está GESTEL y Juan Martel, concejal del gobierno local y funcionario en excedencia como peón agrícola del Cabildo de Gran Canaria, un puesto que mantiene en pausa mientras se dedica a la política, dejando a otro trabajador sin la oportunidad de ocupar esa plaza.

Publicidad Arbitraria y Sin Control

Martel, conocido por su cómoda trayectoria en la política, parece haber convertido los recursos destinados a la publicidad institucional en una herramienta de promoción personal y de complacencia mediática. Su gestión no solo resulta cuestionable por la falta de criterios claros, sino también porque ignora el acuerdo de pleno que exige la retirada de esta publicidad institucional. En otras palabras, lo que debería estar al servicio de la ciudadanía se utiliza para favorecer intereses políticos y comprar silencios mediáticos.

Medios locales que sobreviven gracias a este flujo de dinero público evitan criticar la gestión de Martel, manteniendo un silencio cómplice mientras el despilfarro continúa. Sin embargo, no todos los medios sucumben a este juego. Algunos, como nosotros, rechazamos esta publicidad institucional y exigimos el fin de estas prácticas que perjudican la transparencia y el interés colectivo.

La Pasividad del Alcalde: Un Problema Mayor

El papel del alcalde en este asunto es igualmente reprochable. En lugar de tomar medidas para frenar este uso arbitrario de fondos públicos, ha optado por mirar hacia otro lado, permitiendo que Martel continúe actuando a su antojo. Esto no solo refleja una falta de liderazgo, sino también una preocupante permisividad frente a prácticas que erosionan la confianza de los ciudadanos en sus instituciones.

Una Invitación al Cambio

Desde aquí retamos al alcalde a que tome decisiones claras y contundentes. Ordene la retirada inmediata de toda publicidad institucional y someta este gasto a una revisión rigurosa. ¿Qué pasará cuando los medios que ahora elogian a Martel dejen de recibir esos fondos? ¿Seguirán callados?

La ciudadanía de Telde merece una administración transparente y responsable, no una que permita a un concejal vivir de la política con “las manos en los bolsillos” mientras perpetúa un sistema de despilfarro y favoritismos. Es hora de exigir responsabilidades, tanto a Martel como al alcalde que lo mantiene en su puesto. Telde merece algo mejor.