29 de Septiembre de 2024 a las 12:37
Recientemente publicamos un artículo titulado "¿Está seguro su dinero en el BBVA-Telde?", donde narrábamos el caso de una empresa de Telde que fue víctima de un cargo fraudulento de 8.000 euros.
Hace tiempo que el BBVA está perdiendo poco a poco la confianza de sus clientes y los recientes casos de sustracción de fondos lo confirman de forma alarmante. No estamos hablando de una excepción ni de un incidente aislado, sino de una tendencia preocupante que parece indicar que el banco ha dejado de lado una de sus responsabilidades más básicas: proteger el dinero de sus clientes. Este problema se ha extendido a diferentes partes del país, afectando tanto a pequeños ahorradores como a empresas locales, y lo más grave no es solo el robo en sí, sino la pasividad y desinterés con la que el banco responde a estas situaciones.
foto: PRESIDENTE BBVA "EL RESPONSABLE"
Recientemente publicamos un artículo titulado "¿Está seguro su dinero en el BBVA-Telde?", donde narrábamos el caso de una empresa de Telde que fue víctima de un cargo fraudulento de 8.000 euros. A pesar de las denuncias y las pruebas presentadas, la entidad bancaria no solo no ha devuelto el dinero, sino que tampoco ha ofrecido ninguna explicación clara o solución definitiva. Desde la publicación de este caso, decenas de clientes han contactado con nuestra redacción para contarnos historias similares: robos de sus cuentas a plena luz del día y una entidad que, en lugar de protegerles, se lava las manos.
Este modus operandi es indignante. Los clientes confían en los bancos para proteger sus ahorros, no para que sean saqueados desde dentro. Un banco tiene la obligación legal y moral de garantizar la seguridad del dinero de sus clientes, pero en el caso del BBVA, parece que estas responsabilidades se han convertido en papel mojado. ¿Cómo es posible que en pleno siglo XXI, con todas las herramientas de seguridad digital disponibles, se sigan produciendo fraudes tan graves y el banco mire hacia otro lado?
Uno de los testimonios más impactantes que hemos recibido proviene de un vecino de San Gregorio, en Telde, que denunció un robo de dinero de su cuenta hace tres meses. Hasta el día de hoy, sigue esperando una solución por parte del banco. Mientras tanto, su dinero, fruto de su esfuerzo, parece haber desaparecido sin dejar rastro, y lo único que ha recibido del BBVA son evasivas y largas. ¿Qué está haciendo la entidad con ese dinero? ¿Generar intereses en su propio beneficio mientras el cliente sigue en vilo?
La situación es aún más grave cuando los afectados son personas vulnerables. Una vecina de La Paterna nos relató cómo, mes tras mes, desaparecen pequeñas cantidades de su cuenta, y el banco no solo no actúa, sino que la enreda y la vacila, aprovechándose de su edad y de su falta de recursos para defenderse. Finalmente, le devuelven el dinero, pero solo después de pasar por un infierno burocrático y emocional. Mientras tanto, ¿qué hace el BBVA con ese dinero? ¿Juega con los ahorros de sus clientes mientras ellos esperan en angustia?
Es inaceptable que un banco de la envergadura del BBVA siga comportándose de esta manera. No es solo una cuestión de incompetencia, es una falta de respeto y de ética hacia las personas que confían en ellos para proteger sus ahorros. No es admisible que una entidad financiera, que se beneficia enormemente del dinero de sus clientes, no sea capaz de ofrecerles la seguridad mínima que estos esperan.
Las historias de negligencia y desinterés que se multiplican cada día son una señal clara de que BBVA está fallando de forma sistémica a sus clientes. Si la entidad no toma medidas inmediatas para corregir esta situación, su reputación seguirá desmoronándose, arrastrando consigo la confianza de quienes un día creyeron que su dinero estaba seguro en sus manos.
El BBVA está perdiendo clientes a diario, y no es difícil entender por qué. Si el banco no se responsabiliza de garantizar la seguridad de los fondos que le confían, ¿qué sentido tiene seguir confiando en él? En un sistema donde los bancos son las instituciones a las que acudimos para salvaguardar nuestro patrimonio, es imperativo que asuman sus responsabilidades, en lugar de dejarnos indefensos ante el fraude.
BBVA debe responder con hechos, no con palabras vacías, antes de que el daño sea irreversible.
El Faro...que todo lo vé