Telde es una gran ciudad. Su agenda política debe estar a la altura

Telde no necesita que le recuerden que es Gran Ciudad. Lo es por derecho propio: por su población, por su historia, por su peso territorial en Gran Canaria. Pero ser una gran ciudad exige más que cifras. Exige visión, exige liderazgo, exige una agenda institucional que esté a la altura de sus desafíos.

La agenda semanal del alcalde Juan Antonio Peña, publicada conforme a la Ley de Transparencia, es un documento que debería reflejar el pulso político de una ciudad moderna. Sin embargo, lo que encontramos es una sucesión de actos menores, reuniones vecinales, atención ciudadana y celebraciones civiles. Una agenda que, lejos de proyectar ambición, transmite rutina.

¿Dónde están los grandes temas que preocupan a Telde? ¿Dónde está la planificación estratégica en vivienda, movilidad, sostenibilidad, cultura, innovación? ¿Dónde están los encuentros con agentes económicos, con instituciones supramunicipales, con expertos que puedan ayudar a transformar la ciudad?

Una Gran ciudad no se gestiona con gestos simbólicos ni con agendas vacías de contenido político. Se gestiona con trabajo, con planificación, con decisiones valientes. Y sobre todo, con una agenda que marque rumbo, que convoque talento, que inspire confianza.

Publicar la agenda es un acto de transparencia. Pero también es una declaración de intenciones. Y esta semana, la intención parece demasiado modesta para una ciudad que exige mucho más.

Telde merece una agenda que piense en grande. Porque Telde ya es grande.

Editorial_detelde.es