Telde refuerza la movilidad urbana mientras algunos olvidan el bien común

La intensificación del control en las zonas azules del casco urbano de Telde, especialmente en Los Llanos, ha sido una medida largamente esperada para garantizar la rotación de vehículos y favorecer el acceso a los comercios locales. Sin embargo, sorprende la reacción de ciertos trabajadores de la zona, que critican una normativa que busca el beneficio colectivo al pretender ocupar las plazas durante toda la mañana, en perjuicio de vecinos y clientes.

Resulta inaceptable que se ignore la naturaleza de estas áreas, pensadas para favorecer la movilidad y el acceso equitativo, especialmente en una época del año tan crucial como la campaña navideña. Las zonas azules gratuitas con un límite de dos horas, implantadas originalmente por la formación CIUCA durante la gestión de Carmelo Reyes como concejal de Tráfico, son un recurso valioso que debe respetarse. Esta medida no solo fomenta la rotación, sino que dinamiza el comercio local, una necesidad compartida por la mayoría de los ciudadanos.

El actual concejal de Tráfico, que ha retomado el control en este ámbito, merece reconocimiento por reforzar una normativa que había caído en desuso. Es incomprensible que algunos prioricen su comodidad sobre el bien común, olvidando que estas plazas son un recurso compartido. ¿Acaso pretenden monopolizar un espacio público diseñado para facilitar la convivencia urbana?

Desde el Ayuntamiento de Telde, se recuerda la importancia de respetar los tiempos máximos de estacionamiento, además de destacar los esfuerzos por crear nuevos espacios de aparcamiento y reabrir recintos cerrados, como el de San Juan. Estas iniciativas, lejos de perjudicar a los trabajadores, buscan un equilibrio que beneficie a todos, incluidos ellos mismos.

En una sociedad donde el espacio urbano es limitado, la solidaridad y el cumplimiento de las normas son fundamentales. Aplaudimos al concejal de Tráfico y al equipo municipal por no ceder ante presiones individuales y trabajar en favor del interés general. Telde avanza gracias a políticas responsables que priorizan el bienestar colectivo sobre intereses particulares.