Telde se une al Día Mundial para la Prevención del Suicidio con un gesto simbólico y un mensaje de esperanza

El Ayuntamiento de Telde, a través de la Concejalía de Sanidad que dirige Janoa Anceaume, se suma este miércoles al Día Mundial para la Prevención del Suicidio con una acción simbólica cargada de significado: la iluminación en color amarillo del edificio principal del consistorio, ubicado en El Cubillo. El gesto busca visibilizar una problemática que afecta a miles de personas y que, en muchas ocasiones, se vive en silencio.

La iniciativa tiene como objetivo concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de hablar abiertamente del suicidio, romper el estigma que lo rodea y fomentar la búsqueda de ayuda profesional. En palabras de Anceaume, “desde las instituciones debemos romper con el estigma y hablar con responsabilidad sobre el suicidio. Muchas personas que sufren no piden ayuda por miedo al juicio público o a la incomprensión”.

La concejala ha hecho un llamamiento a quienes atraviesan momentos difíciles, animándoles a acudir a profesionales de la salud mental. “Hacerlo no es un acto de cobardía, ni un signo de debilidad, al contrario, nos estaremos demostrando a nosotros mismos que tenemos fortaleza y que vale la pena seguir adelante”, añadió.

Con esta acción, Telde se suma a una red global de ciudades comprometidas con la prevención del suicidio, recordando que la empatía, el acompañamiento y el acceso a recursos adecuados pueden marcar la diferencia en la vida de muchas personas.

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