Crónica de una silla abandonada en San Gregorio

En la peculiar odisea de una silla en la avenida de la Constitución, una vecina de Telde se ha convertido en testigo consternada de lo que parece ser un fenómeno único: ¡una silla que camina sola!

En sus múltiples visitas a la zona de San Gregorio, nuestra intrépida vecina se ha topado en repetidas ocasiones con una silla aparentemente abandonada. Pero aquí no termina la historia, porque una semana después, para su estupor, se ha encontrado con la misma silla moviéndose ligeramente más abajo en la misma avenida. ¿Una silla con patas veloces o acaso una estrategia de decoración vanguardista que no comprendemos?

La frustración de nuestra heroína de la avenida radica en la aparente falta de atención por parte de los operarios de recogida o limpieza, quienes, según ella, no están cumpliendo su deber correctamente. La silla, valiente exploradora del asfalto, ha desafiado todas las leyes de la estática en solo una semana, dejando a la comunidad preguntándose si deberíamos incluir cursos de gimnasia para muebles en el currículo de limpieza municipal.

Esta silla misteriosa ha demostrado que tiene cuatro patas, pero hasta ahora, nadie sabía que también era experta en el arte de la “marcha silla”. ¿Estamos ante un nuevo héroe urbano o simplemente ante la desaparición del manual de recogida de enseres? ¡Misterios de la vida cotidiana en Telde! 😄